miércoles, 30 de marzo de 2011

El PRI de Héctor Yunes

Teléfono Rojo
Eliseo Tejeda Olmos

Sin duda que la llegada de Héctor Yunes Landa a la presidencia del CDE del PRI vendrá a darle movilidad a un partido que no tiene porqué permanecer inmóvil y a la expectativa, como estaba ocurriendo con Ranulfo Márquez, quien no pudo o no quiso, para el caso el resultado es igualmente negativo, cumplir con los compromisos pendientes que dejó el actual presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, el diputado plurinominal Jorge Carvallo Delfín.
Pese a que las instituciones, que no los hombres que las presiden, acuerdan convenios y compromisos políticos y financieros, una vez cambiados los responsables los que llegan alegan que dichos acuerdos deben ser cumplidos por quien se fue, tal y como sucedió en el caso de Ranulfo y Carvallo.
Al primero no le importaron firmas de anteriores colaboradores y al segundo, poco le importa lo que quedó atrás y lo peor, tampoco lo que encontró en el Congreso en que aplica la misma fórmula, lo que pasó, pasó y no volverá a pasar, aunque dicen que su actitud se debe a que poco habrá de calentar la silla de la presidencia de Coordinación Política del Congreso del Estado que bien podría ser ocupada por los diputados Flavino Ríos Alvarado o Américo Zúñiga Martínez, hoy flamantes vice coordinadores de la fracción priísta en la LXII Legislatura local.
Son semejantes las carreras y formaciones de Ranulfo y Jorge Carvallo, quizá por eso también las similitudes en sus comportamientos políticos, porque han ascendido en base a su trabajo al interior de la estructura gubernamental.
Todos lo saben y ellos también, de ahí que su atención esté siempre puesta en satisfacer a quien los ha llevado a escalar posiciones, de ahí en fuera no hay nada para quien no les aporte un beneficio directo o indirecto. Claro, no están obligados –como muchos funcionarios- a responder a intereses de bienestar común o ciudadano, para qué si no han llegado a algún puesto por esa vía.
Con Héctor Yunes, los priístas esperan que su partido comience el movimiento que se necesita para posicionarse en el ya cercano 2012 y la importante elección que habrá de llevarse a cabo. Llegarán al CDE seguramente gente leal a Yunes Landa, como lo han sido Jorge Moreno Salinas y Gustavo Cadena Mathey.
Enhorabuena porque al PRI llegue también una etapa de cumplimiento de compromisos y acuerdos y no prevalezca la apática actitud de burócratas de la política.
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