Eliseo Tejeda Olmos/ Teléfono Rojo
Un 19 de marzo por la mañana, hace seis años, Pepe Valencia Sánchez convocó a los afiliados a la Acover a un desayuno con el entonces gobernador electo Cuitláhuac García Jiménez quien asistió acompañado de la diputada local electa Rosalinda Galindo.
Cuitláhuac se mostró cordial con los asistentes e informó que Ángel Álvaro Peña sería el representante de la oficina de comunicación social para medios de la Ciudad de México.
Desde entonces comenzaron los desplantes de Cuitláhuac con periodistas, empezando con don Álvaro, quién le renunció después de que nunca lo apoyó en nada para el desempeño de su labor.
En cuanto a los que asistimos al desayuno, jamás volvió a cruzar palabra y mucho menos a atender cualquier solicitud de información.
Una de las primeras acciones de Iván Luna, su coordinador de Comunicación Social, fue desaparecer la sala de prensa a la que las y los reporteros de la fuente gubernamental acudíamos para redactar las notas y enviarlas a medios de la Ciudad de México, por fax, internet o llamada telefónica.
Así que su inexistente relación con los medios locales y de la Ciudad de México no es de ahora que se quiere victimizar por las notas del #malgobierno que encabezó desde hace más de cinco años.
